Kellanova, mejor conocido como Kellogg, y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), reconocen la importancia de la innovación en la agricultura a través de nuevas prácticas sostenibles para la productividad agrícola y sostenibilidad ambiental.
La innovación biotecnológica es crucial en cada proceso de la agricultura sostenible, desde la identificación y selección de genes beneficiosos hasta la implementación de técnicas de ingeniería genética avanzadas para desarrollar variedades de maíz más resistentes y nutritivas. Esto no solo disminuye el uso de pesticidas y fertilizantes, sino también reduce el impacto ambiental y mejora la seguridad alimentaria global.
Gracias a la colaboración con el CIMMYT, se ha beneficiado a más de 1,200 agricultores de Sinaloa y Guanajuato con la transferencia de conocimiento en prácticas sustentables, lo que ha permitido la reducción de hasta 21% en el uso de agua para la producción de maíz amarillo en más de 5,000 hectáreas, incluso en condiciones de sequía moderada.
Las diversas prácticas implementadas en el año reciente le ayudaron a los agricultores a reducir sus costos de producción y tener ingresos 10% superiores que el agricultor promedio. Además de generar impactos positivos en las comunidades agrícolas, las prácticas sustentables que promueve Kellanova a través de CIMMYT, tienen un impacto positivo en el medioambiente, ya que se reduce el consumo de combustible y consecuentemente las emisiones de CO2 al ambiente.
Además de su colaboración con el CIMMYT, Kellanova está comprometida en reducir el uso del agua en un 30 % en plantas de producción en regiones con alto estrés hídrico para fines de 2030 (con línea base en 2015). A través de iniciativas innovadoras y tecnologías avanzadas, se han logrado reducciones significativas en el uso de agua en sus instalaciones en toda la región, donde tan solo en México, en 2023 se redujo en un 14% con respecto al año anterior en sus operaciones.
Imagen proporcionada por Kellanova