Por Paloma Martínez C.
Conexión360 entrevistó a la Doctora Virginia Cobo-Losey Treviño, Médico Cirujano, experta en Obesidad y Metabolismo, con Maestría en Nutrición y Bariatría Clínica.
Quien nos señala que la obesidad y el sobrepeso son dos temas de los cuales se viene hablando mucho antes de la pandemia, que ya afectaba a miles de personas y con el confinamiento ha incrementado el número de casos.
Yo lo veo en el día a día, pacientes que antes tenía una actividad recreativa, una vida más activa y que hoy en día se descuidó mucho. También estar en casa, es otra cosa, la motivación baja, el estrés aumenta, la depresión, el trabajo, la ansiedad, hace que las personas coman más, se vuelve un círculo vicioso, todo es consecuencia de lo que estamos viviendo en estos últimos meses.
Estos problemas, comenta que se reflejan más en los adultos, aunque el problema de obesidad en México es muy grave. Siendo los niños los que mejor se adaptan a las situaciones. Los adultos han tenido que cambiar su estilo de vida en todos los aspectos.
La obesidad es una enfermedad crónica que no tomamos en cuenta, pero va allá, es una cuestión de salud muy importante. Hay que tomarlo con seriedad y tiene que ser tratado por especialistas.
‘NO MÁS KILOS’, es una página de Facebook que recomiendo, tiene varias recomendaciones médicas. Tips, recetas, ejercicios y más, también se pueden solicitar consultas. «Es un medio efectivo, sobretodo en estos tiempos de pandemia, las consultas virtuales es algo que ha funcionado gratamente».
El COVID-19 ha reflejado altos índices de mortalidad por culpa de obesidad, por ser un factor de alto riesgo. La población en general ha tomado esto como una alerta y empezar a tener cambios alimenticios, hay momentos de reflexión, en donde las personas han tomado la iniciativa de cuidarse más.
La realidad un cambio de hábito es difícil cambiarlo de la noche a la mañana, por eso la gente busca dietas milagro y no es la solución. La idea que yo explico, es que estos cambios de hábitos requieren paciencia, es mejorar cada día, no dar espacio a la frustración, los cambios se dan uno a uno. El ejercicio es igual, requiere su tiempo, la cuestión es mantenerse. La cuestión emocional ayuda mucho.
La voluntad es como todo, cosas mágicas no existen, debemos ir mejorando poco a poco, se requiere perseverancia, hay que aprender a vivir. Aprender a comer de manera balanceada.
Para decir que una persona tiene un problema de obesidad, es cuando tiene una acumulación excesiva de grasa, que tiene un desbalance entre la ingesta y lo que gastamos (en peso). La obesidad se divide en grados, 1, 2, y 3, en cuanto al índice de masa corporal, que es la proporción entre el peso y la estatura de cada persona. Hay que sacar el índice de masa corporal de cada paciente.
Algo muy importante, es que la tecnología nos va ayudando a unas básculas que te miden justo esto, la masa corporal, músculo, agua, hueso y grasa. La obesidad y el sobrepeso se clasifican por norma y por la OMS por grado 1, grado 2 y grado 3.
El ejercicio estimula al músculo, pero también tenemos que cuidar las cantidades de comida que comemos, tener una dieta, mantenerse activos. Finaliza, «las cosas van a ir mejorando poco a poco, hay que tener mucha paciencia, saber que mejorar los hábitos no es cosa fácil, es poco a poco para que tengan éxito…no hay imposibles. Comienza un estilo de vida saludable».
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