Estamos acostumbrados a pensar en los alimentos orgánicos como algo que está fuera de nuestro alcance, que se consigue sólo en tiendas especiales, que sólo consumen los veganos o quienes llevan un estilo de vida holístico e híper saludable; incluso que son alimentos light que nos ayudan a perder peso. Es decir, estamos acostumbrados a pensar en ellos como algo complicado.
La realidad es que los alimentos orgánicos son mucho más simples que todo lo que nos imaginamos. La realidad es que son alimentos que están al alcance de todos, y que podemos conseguirlos en supermercados alrededor del país, que podemos consumirlos todos, sin importar nuestro estilo de vida, y que podemos utilizarlos para preparar los platillos que más nos gustan, teniendo la confianza de que son más saludables, más nutritivos, más sustentables con el medio ambiente y más justos con sus productores.
En Aires de Campo creemos firmemente en entregar productos buenos desde su origen y tenemos la misión de incorporar por lo menos un orgánico al día en la cotidianidad de las personas; todo esto a través de una cadena simple: de la granja y las pequeñas comunidades de productores mexicanos a las cocinas y mesas de las familias mexicanas, sin más intermediarios.
Sabemos que las cosas más simples son las que más importan al momento de elegir lo que va a nutrirnos y a nuestras familias; tomemos como ejemplo las tablas de ingredientes y de información nutrimental, entre más complicados de leer o pronunciar son los ingredientes y compuestos químicos utilizados en un alimento, más desconfianza nos generan pues nos confunden y no entendemos en realidad qué es lo que estamos poniendo en nuestros organismos.
Por eso, simple es la honestidad de producir alimentos cultivados y hechos con las manos de pequeños productores mexicanos, sin ingredientes difíciles de pronunciar ni compuestos químicos; simple es una cadena de valor tanto para productores como para consumidores, una cadena que lleva alimentos buenos de origen desde las granjas hasta las mesas; simple es artesanal, sin intervención de máquinas y hechos con las manos de personas como tú; simple es delicioso y nutritivo, tal cual como la tierra nos lo da. Así, sin complicaciones ni trucos, en Aires de Campo sabemos que simple, es orgánico.